Seguramente nadie olvida su "primera vez" en muchos aspectos y, hablando de fumar, desde luego se recuerda la marca y el momento en que se le dio el golpe al cigarrillo, en lo particular yo recuerdo que tendria entre 10 u 11 años, cuando llego el momento de tener frente al cigarro.
Mi mente se traslada hacia un patio trasero que hay en la casa donde aun vivo, me lleve uno de los cigarros del abuelo, era un Delicado y con un fosforo encendi el cigarro, le di dos jalones sin darle el golpe, ya al tercer jalon de di el golpe, el cual me resulto algo inquietante por saber que se sentia, porque el abuelo se los fumaba con mucho placer, pues mi primer sintoma no fue muy grato, un mareo de regular intensidad, sin embargo espere a que volviera a estar bien para darle el otro golpe, vino un mareo menos intenso que el primero, mi boca se seco y la saliba escaseaba de mi boca, dejando un poco escaldada la lengua y asi fue hasta que me termine el cigarro, al cual le daria cuatro golpes.
Al dia siguiente volvi a repetir la escena y mi mareo era una cosa de nada, fue cuando le di mas fumadas con el golpe y, asi sucesivamente por una semana, pero la sensacion de fumar se me hacia mas intensa, hasta que de plano me lleve una cajetilla de Delicados y esconderlos en un lugar donde yo solo sabia que ahi estaban, comenze a fumar dos cigarros al dia.
Posteriormente me llevaba la cajetilla con los fosforos a la escuela, donde en secreto fumaba durante el recreo, cuando de repente me cacho el conserje de la escuela, con quien llevaba buena amistad, tan solo sonrio y me dijo,-ten mucho cuidado, porque si te llega a ver un maestro o un chivaton, te expulsan de la escuela-, recuerdo que a ese señor le gustaba fumar los cigarros Del Prado.
Un dia que le ayude a barrer los patios, terminando la tarea nos dimos un descanso y platicabamos, cuando de repente saco su cajetilla, tomo un cigarro y lo encendio, yo seguia charlando con el conserje, cuando de repente me pregunto,-¿Quieres darle una fumada a mi cigarro?-, mi contestacion fue afirmativa y me permitio darle dos fumadas a su cigarros, sorprendido el señor me dijo,-Cabron, pero si bien que le das el golpe y los saboreas-, mi contestacion fue,- Pues por eso me gusta Fumar, sino que chiste-, el señor me contesto,-Yo comenze igual que tu, asi de chavo, nada mas no fumes mucho, porque es muy malo para la salud-. Y asi continue mi con el consumo del cigarro particularmente, corri con mucha suerte, porque cuando en mi casa se enteraron de que ya fumaba por bocas de vecinos quejosos, yo ya tenia 16 años y, el regaño de mi padre principalmente, no fue tan duro como yo esperaba, con el pasar de algunos años, mi padre me dijo que, el tambien habia fumado desde niño, mas les aseguro una cosa, mi padre no fumaba mucho, ni el abuelo, pero sabian fumar, puros y pipa en el caso especifico del abuelo, yo si sali mas fumador que todos los integrantes de la familia, mi salud la considero normal, aunque debo admitir que cuando hago trabajos desgastantes, ya me fatigo, pero el cigarro (principalmente) sigue siendo mi amigo fiel donde yo quiera que vaya, el siempre esta en la buenas y en las malas.
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